De enero a abril el 83% de las ventas externas del país se dirigió al vecino del norte, marcando un máximo histórico, pese a la aspiración del actual gobierno de una dispersión más equilibrada.
El gobierno de México ha fallado en su intención de diversificar las exportaciones mexicanas de productos, alcanzando un nivel máximo de 83% de sus ventas externas concentradas hacia Estados Unidos.
Desde un principio, la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador se fijó la meta de ampliar la proporción de destinos diferentes a Estados Unidos en las ventas de los productos mexicanos al extranjero.